Por tratarse de una las ciudades más activas y pobladas de España definitivamente hay mucho qué ver en Valencia, esta localidad te ofrece gran valor paisajístico y una infraestructura orientada a prestar servicios de primera, sobre todo para el sector turismo.
Gracias a su ubicación en la costa levantina de la Península Ibérica y su extenso casco histórico Valencia está revestida de un gran encanto y ofrece mucho para descubrir. La ciudad fue fundada por los romanos en el año 138 a.c, aunque lo que modeló su forma de vida, lengua y religión fue la ocupación musulmana.
Tiene una dinámica muy activa y por ubicarse a orillas del Mediterráneo durante el verano recibe cientos de turistas a los que la ciudad ofrece una oportunidad extraordinaria de disfrute. Deportes acuáticos, servicios de hotelería, restaurantes y vida nocturna forman parte de algunas de las posibilidades que harán de tus recorridos por Valencia un momento inolvidable.
Hay mucho qué ver en Valencia, esta población tiene una gran tradición de fiestas populares y en los últimos años ha desarrollado infraestructura para el turismo cultural; la oferta de teatros, museos y salas para la exhibición de muestras artísticas es creciente.
Algunas cosas qué ver en Valencia
El clima es uno de los encantos de esta ciudad buena parte del año Valencia tiene temperaturas favorables para pasear por sus calles. Te podemos recomendar visitarla entre abril y octubre, en ese tiempo las lluvias son escasas y presenta una temperatura promedio de 30° C.
Ese clima mediterráneo es favorable para realizar actividades al aire libre y visitar sitios de interés para turistas locales e internacionales, hay algunos lugares que definitivamente no puedes dejar de visitar en tu próximo viaje a Valencia.
Una reserva natural muy importante y que vale la pena conocer es La Albufera, este parque está representado por el lago más grande de España y se separa del mar por la Dehesa del Saler que es un bosque de pinos muy hermoso, todo el área está rodeada por manantiales y cultivos de arroz.
Dentro de La Albufera puedes realizar recorridos en barca o disfrutar de una vista panorámica desde la ermita de los Santos de Sueca.
Si eres de los que disfruta de la arquitectura gótica algo qué ver en Valencia es el Palacio de Dos Aguas. Se trata de un monumento que data de mediados del siglo XIX, es una edificación con espacios de gran belleza y lujo, en su interior funciona el Museo de Cerámica que exhibe piezas que datan del siglo XVIII.
El Mercado Central de Valencia es otro rincón que no puedes dejar de visitar, tiene una estructura modernista desarrollada por alumnos del artista Domènech i Montaner y en él se comercializan productos locales que disfrutan mucho los turistas.
En el mercado puedes hallar alimentos propios de la gastronomía valenciana, sobre todo verduras, pescados y aceite de oliva, característico en la cocina de la zona costera. Al interior de Valencia se consume más carne de vacuno y cerdo, aunque lo que comparten es la fuerte presencia del arroz en muchos platos, tal como lo demuestra la famosa paella valenciana.